Una separación o divorcio puede ser una experiencia difícil para toda la familia. Si usted y su pareja están considerando separarse o divorciarse, pueden planear cómo atravesarán el proceso. Al hacer un plan o una lista de los pasos a seguir, asegúrense de considerar estrategias para ayudar a sus hijos en el proceso.
Lo primero a considerar es la seguridad de los niños y la suya. Si siente que no está seguro en su hogar o con su pareja, busque un lugar seguro y consiga el apoyo y el asesoramiento de un consejero profesional o asesor legal. Puede llamar a la Línea Directa Nacional de Violencia Doméstica al (800) 799-7233, o visitar https://www.domesticshelters.org para buscar un refugio cerca de usted.
Si su situación es segura, hay muchas formas en las que puede ayudar a sus hijos a superar una separación o divorcio. Comience por asegurarse de mantenerse saludable: duerma lo suficiente, haga ejercicio y coma alimentos saludables Será más fácil ayudar a sus hijos si primero ha atendido sus propias necesidades. Utilice los siguientes consejos para elaborar un plan de apoyo con su pareja.
Después de que usted y su pareja hayan tomado la decisión de separarse o divorciarse, siéntese y hable con sus hijos al respecto. De ser posible, tengan esta conversación juntos. Explique a los niños que se avecinan cambios, pero que quiere que sepan que los aman, que están seguros y que los cuidarán sin importar lo que pase. Hable con sus hijos sobre lo que pueden esperar y asegúreles que la separación no se debe a nada que ellos hayan hecho. Puede usar algunos de los siguientes libros infantiles para ayudarlo a guiar sus conversaciones y hablar sobre sentimientos.
- Always Mom, Forever Dad (Siempre mamá, papá para siempre) de Joanna Rowland y Penny Weber
- Dinosaurs Divorce (Los dinosaurios se divorcian) de Laurie Krasny Brown y Marc Brown
- Divorce is the Worst (El divorcio es lo peor) de Anastasia Higgin-Botham
- Emily’s Blue Period (Cuando Emily estuvo triste) de Cathleen Daly y Lisa Brown
- Living with Mom and Living with Dad (Vivir con mamá y vivir con papá) de Melanie Walsh
- My Family’s Changing (Mi familia está cambiando) de Pat Thomas
- The Enormous Suitcase (La maleta enorme) de Robert Munsch
- Two Homes (Dos hogares) de Claire Masurel
Mantenga todo lo más habitual posible. Continúe con sus rutinas para la escuela, la hora de dormir, la tarea, el manejo del comportamiento, etc. Si necesita hacer un cambio en la rutina, háblelo por anticipado con sus hijos para que estén emocionalmente preparados. Si no pueden quedarse en la misma casa, explique que necesitan trasladarse a una nueva e involucre a los niños: pregúnteles qué tipo de características de vivienda son importantes para ellos. Más adelante se presentan recursos útiles para preparar a los niños para el traslado.
Evite involucrar a sus hijos en los procesos judiciales de separación o divorcio y no se apoye en su hijo para obtener respaldo emocional. Muchas veces los niños ofrecen apoyo cuando ven que uno de los padres se siente triste, pero pueden ponerse temerosos, enfadados, tristes o frustrados si comienzan a sentir que cada uno de los padres los empuja en una dirección diferente. En lugar de buscar apoyo en los hijos pequeños, busque consuelo y consejo de amigos o terapeutas. También es importante evitar peleas o conversaciones de adultos frente a los niños. Programe reuniones en privado con su pareja para discutir los acuerdos de separación o divorcio. Mantener esas discusiones frente a los niños crea una sensación de inestabilidad y temor. Limite la participación de sus hijos para que su bienestar mental y emocional sea una prioridad.
Los niños se beneficiarán si tienen a ambos padres en sus vidas; aunque sea difícil, es importante que trabajen juntos para establecer un horario habitual para las visitas. Pregunte a sus hijos cómo se sienten y ayúdelos a expresar sus pensamientos y emociones. Mientras hable, ayude a los niños a pensar con optimismo y hallar soluciones. Por ejemplo, si su hijo dice que se siente triste, pregúntele si puede pensar en algo que lo haga sentir feliz. También podría recordarle otra oportunidad en la que se sintió triste y señalarle cómo lo superó y terminó por sentirse mejor. Enseñarles a los niños a expresar sus emociones primero y luego enfrentarlas los hará más resistentes en este momento difícil.
La forma en que los niños reaccionen a la separación o el divorcio depende de su edad, experiencia y situación familiar. Deberá estar preparado para responder preguntas y ser paciente. Este es un evento que cambia la vida y los efectos no desaparecerán de inmediato. Comuníquese con sus hijos con frecuencia para hablar sobre cómo se sienten y qué necesitan. Si ve que su hijo experimenta emociones extremas, o que hace regresiones (se chupa el dedo o moja la cama por la noche), consulte a un médico profesional . Ir a un médico o a un consejero le demuestra a su hijo que está bien pedir ayuda cuando la necesita.
Explore los recursos que siguen para obtener más información para ayudar a su hijo a atravesar una separación o divorcio.
Referencias y recursos